Un plan de viabilidad para tu futuro empresarial

Vivimos en un contexto empresarial actual donde, sin duda, la creatividad encuentra premio. Quedarse en lo ya conocido no basta, debemos ser innovadores, diferentes y frescos. Cualidades que nos puede otorgar un buen proyecto empresarial. Ahora bien, podemos tener la idea que revolucionará el mercado de manera definitiva, pero quizás no sepamos darle el recorrido que merece en el tiempo. Es por ello que debemos aprender a realizar un plan de viabilidad que haga nuestro proyecto sostenible económicamente en el tiempo, le permita crecer y establecerse dentro de su nicho de mercado.

Es algo que todo emprendedor necesita antes de lanzarse a la aventura. Porque una cosa es abrazar la excitación del riesgo y entender el mundo empresarial como un lugar donde la valentía cobra juega un importante papel, y otra hacerlo a ciegas. Un plan de viabilidad es una herramienta esencial para conocer de la manera más objetiva si nuestra idea de negocio puede prosperar o no hacerlo, y de qué manera lo puede hacer.

El plan se puede llevar de manera sencilla en una hoja de cálculo de Excel, mismamente, bastándose sin más para convertirse en uno de los mejores recursos documentales de un departamento de marketing y comunicación. No hay un modelo estándar para cada uno, pero sí que todo análisis de viabilidad deberá partir de una serie de datos base de naturaleza empírica: medio ambiente del proyecto, rentabilidad, necesidades de mercado, aceptación cultural, legislación aplicable, etc.

Cómo lo afrontamos en Resulting

En nuestra resultoría empresarial contamos con profesionales altamente cualificados y experimentados en el sector, ayudando a decenas de empresas a hacer viables sus proyectos, entre otros servicios.

Nuestros asesores pueden elaborar para tu empresa un completo informe en el que se incluya una proyección económico-financiera a entre tres y cinco años. El plan de viabilidad es, per se, un análisis serio, sólido y viable para defender tus intereses. Te valdrá para hacerlo ante las entidades bancarias, organismos públicos facilitadores de financiación y subvenciones, y en plataformas de inversores privados, entre otras vías de encontrar financiación para el proyecto.

Todos los planes de viabilidad tienen el objetivo común de salvaguardar el futuro de tu empresa partiendo de tu presente y una estimación próxima en el tiempo, pero, a su misma vez, todos son diferentes porque son únicos, es decir, a medida.

Acudiendo a profesionales no solo te llevarás contigo este documento de gran valor para los siguientes pasos dar, sino que seguiremos a tu lado en ese avanzar, participando y supervisando tus progresos. Elaborados desde cero, son totalmente personalizados y orientados al objetivo de obtener financiación, campo en el que somos expertos, y que no se trate de algo flor de un día, sino que garantice la viabilidad, valga la redundancia, de tu empresa.

La certidumbre de los resultados en una resultoría

Vivimos un contexto continuamente cambiante. La pandemia que llegó a nuestras vidas en los primeros meses de este 2020 para olvidar parece que va a seguir con nosotros aún por un tiempo más, para enorme amenaza de una economía que difícilmente podría resistir un parón de la brusquedad del que confinó a nuestra población el pasado 14 de marzo. Los negocios se reinventan, se entregan al teletrabajo, abaratan costes y arriesgan menos. Necesitan sacar mucho de donde hay poco, y hay veces que eso parece imposible. Confiar tus opciones de financiación a una resultaría es un gasto con garantizado retorno, pues de la palabra resultado es de donde nace la palabra resultaría, una evolución natural de la asesoría financiera de siempre.

Entre las claves de la supervivencia a este delicado contexto está, como siempre, la adaptación al medio. Todo empresario que desea lo mejor para sus proyectos sabe que no existe una única fórmula al éxito que dure para toda la vida, sino que la reinvención es algo que todo negocio debe afrontar cada determinado periodo de tiempo. La llegada del coronavirus ha acelerado estos tiempos y obligado a ser más creativos a multitud de empresarios y emprendedores para continuar haciendo viables sus negocios y adaptarse a las necesidades de esta condicionada sociedad.

Una resultaría se posiciona así como una solución necesaria: sabe cómo ayudarte a encontrar financiación pública y alternativa, y posee además las herramientas para guiarte en el liderazgo de tu empresa gracias a sus servicios de auditoría, compliance o de consejero independiente, entre otros.

Resultados garantizados

Es lo que da nombre y sentido a una resultoría, y que la diferencia de una asesoría financiera tradicional. Los resultados están garantizados

Vivimos un contexto continuamente cambiante. La pandemia que llegó a nuestras vidas en los primeros meses de este 2020 para olvidar parece que va a seguir con nosotros aún por un tiempo más, para enorme amenaza de una economía que difícilmente podría resistir un parón de la brusquedad del que confinó a nuestra población el pasado 14 de marzo. Los negocios se reinventan, se entregan al teletrabajo, abaratan costes y arriesgan menos. Necesitan sacar mucho de donde hay poco, y hay veces que eso parece imposible. Confiar tus opciones de financiación a una resultaría es un gasto con garantizado retorno, pues de la palabra resultado es de donde nace la palabra resultaría, una evolución natural de la asesoría financiera de siempre.

Entre las claves de la supervivencia a este delicado contexto está, como siempre, la adaptación al medio. Todo empresario que desea lo mejor para sus proyectos sabe que no existe una única fórmula al éxito que dure para toda la vida, sino que la reinvención es algo que todo negocio debe afrontar cada determinado periodo de tiempo. La llegada del coronavirus ha acelerado estos tiempos y obligado a ser más creativos a multitud de empresarios y emprendedores para continuar haciendo viables sus negocios y adaptarse a las necesidades de esta condicionada sociedad.

Una resultaría se posiciona así como una solución necesaria: sabe cómo ayudarte a encontrar financiación pública y alternativa, y posee además las herramientas para guiarte en el liderazgo de tu empresa gracias a sus servicios de auditoría, compliance o de consejero independiente, entre otros.

Estudios gratuitos para Reindus 2020

Es una de las grandes citas del calendario en la obtención de financiación pública para las empresas industriales, y la apertura de solicitudes está muy próxima a ser abierta, hecho del que te notificaremos si así manifiestas tu interés y en nuestras redes sociales. Dirigido principalmente a pymes industriales y lanzado por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, este año el programa Reindus 2020 incluye algunas novedades que debes conocer. Pero, antes, hablemos un poco de Reindus en sí. Y, si cuando termines de leer estás interesado, pero no estás seguro de si tu empresa cumple para optar a esta financiación, en Resulting te hacemos un estudio gratuito.

Este programa tiene por objetivo impulsar la creación o traslado de establecimientos industriales, mejoras y/o modificaciones de la línea de producción, así como la implementación de tecnologías de la industria conectada 4.0, como así reza en su página web. Es decir, hacer crecer a las empresas industriales de nuestro país: pymes y grandes empresas del sector industrial, encuadradas en la Sección C (divisiones 10 a 32), de la industria manufacturera, y en la sección 38.3X, la gestión de residuos, del CNAE 2009.

Así, Reindus tiene por finalización financiar inversiones de los siguientes tipos:

  • Obra civil: inversiones materiales en urbanización y canalizaciones, con exclusión de terrenos.
  • Edificación: inversiones materiales para la adquisición, construcción, ampliación o adecuación de naves industriales.
  • Adquisición de aparatos y equipos materiales: activos fijos vinculados a la producción, excluidos los elementos de transporte exterior.
  • Ingeniería de proceso de producción: gastos de personal propio y colaboraciones externas necesarias para el diseño de procesos.

Para este 2020, la inminente convocatoria presenta algunas novedades que te desvelamos a continuación:

  • Los préstamos serán como máximo del 75% del presupuesto presentado por cada empresa.
  • La inversión mínima a realizar es de 100.000€.
  • El importe global del préstamo a conceder por beneficiario no podrá superar los 800.000€.
  • El plazo de amortización máximo es de seis años con un máximo de tres de carencia.
  • El tipo de interés se fija a partir del 0,1% y 0,19% para pymes, con aportación de garantías de solo el 20%.
  • El préstamo se cobra en su totalidad en un plazo de seis meses desde la presentación de la solicitud, sin la necesidad de justificar el inicio o realización de las inversiones.

Como expertos con experiencia contrastada y resultados garantizados, desde Resulting te animamos a confiar en nosotros para servirte de guía en todo este proceso hasta financiar a tu empresa industrial y así poder poner en marcha todos los proyectos que pretendes.

Y, aún más importante, queremos hacerte saber que, si no tienes clara la viabilidad de tu empresa a la hora de optar a entrar en Reindus 2020, nos ponemos a tu disposición para realizarte un estudio gratuito con el que salir de dudas y estar preparado para dar el siguiente paso.

Estados financieros y financiación empresarial

Los estados financieros son documentos que reflejan la situación contable de una empresa en un período determinado. Ofrecen la información necesaria para obtener un diagnóstico financiero y tomar decisiones de cara al futuro. Los principales datos que se tratan son la rentabilidad, la liquidez, el endeudamiento y el equilibrio de las finanzas. Además de las ventajas que implica el conocimiento real para la financiación empresarial, el registro de otros datos es obligatorio por ley.

Fases de un diagnóstico financiero

Los estados financieros requieren de una etapa preliminar, en la cual se definen los objetivos de la investigación del estado de la empresa, los datos necesarios y los índices para la elaboración de los estados financieros. En una segunda etapa se realiza el análisis formal, donde se aplican las técnicas seleccionadas para la obtención de resultados. Y, por último, llega el análisis real que permite conocer la situación, detectar los errores y planificar nuevas acciones.

Tipos de Estados Financieros

Los administradores de empresas seleccionan las herramientas más eficaces para la gestión de la corporación. Entre los más habituales y útiles se encuentran:

Balance General

Se visualiza de forma clara la situación patrimonial actual de la empresa. Este balance se basa en una confrontación de activo, pasivo y patrimonio neto. El activo debe ser equivalente a la suma de los otros.

Estado de resultados

Generalmente se trata de un ejercicio financiero anual, pero su periodicidad es flexible. El objetivo principal es conocer la rentabilidad y analizar los resultados en relación con los objetivos propuestos. El proceso consiste en tomar los ingresos y restar los diferentes gastos, que incluyen efectivo, intereses, pagarés y cheques a vencer.

Estado de inversiones

Salvo en casa particulares, estos estados financieros son meramente informativos para complemento de otros análisis. Los datos que otorgan son básicamente el estado actual y evolutivo de las inversiones realizadas.

Evolución de Patrimonio Neto

Se trata de una descripción precisa de la estabilidad o cambios patrimoniales que tenga una empresa en un periodo contable. El documento refleja la cuantificación de bienes materiales e inmateriales que conforman el patrimonio neto.

Estado de flujo

También conocido como estado de efectivo, en el cual se visualizan los datos necesarios para evaluar la liquidez: variaciones, movimientos, origen y destino del efectivo que se administra. En esta categoría hay una subclasificación: de actividades de explotación, de actividades de inversión y de actividades de financiación.

Utilidades de los estados financieros del periodo contable analizado

Con estos estados financieros se garantiza la obtención de información adecuada para un análisis real de utilidad, para decisiones financieras futuras. El ritmo a seguir a partir de este ejercicio está basado en estos resultados. Algunas de las ventajas que se obtienen son: asignación de responsables, previsión de ajustes y nuevas inversiones, transparencia financiera. No hay que olvidar que, si se trata de sociedades, los documentos sobre estados financieros son requeridos por el Registro Mercantil.

Balance final de año: tu resultoría te ayuda a cuadrar y maximizar ventajas

Llega noviembre y con él el calendario parece acelerarse. Es momento de cerrar un ciclo económico y de planear el que sigue. El nuevo año está cerca y es momento de decisiones.  Para eso, el balance final de año es una fuente de información clave para la mejora.

La presentación de resultados anuales en el Registro Mercantil es una obligación, sí. Pero también es una muestra de todo está en regla y de que se ha cumplido con la normativa vigente. Legalmente todo tiene que cuadrar.

Asimismo, este balance final del año es un resumen de cómo ha resultado la actividad en el negocio. Será buen punto de partida para el análisis y la  planificación para el futuro.  Por ello, hay que asumir el balance final del año con espíritu crítico y mente abierta: si los números cuadran, será estimulante y motivador. En caso contrario, será la oportunidad para encarar la optimización de la gestión.

¿Cómo hacer el balance final del año?  

El balance de las cuentas anuales resume los datos de bienes, deudas y derechos empresariales. Es fundamental tomárselo muy en serio, porque de su veracidad y corrección dependerá el futuro de la empresa. De nada vale mostrar en los papeles que todo está bien si no es así, e balance no servirá de nada, pues no aportará una información útil.

Algunos datos básicos:

  • Es preciso registrar la información real.  Es útil que los datos puedan compararse con información similar en otros períodos.
  • Se calculará la suma total de activos. Se deben considerar todos los activos: los corrientes (dinero en caja, bancos, cuentas por cobrar e inventarios) y los no corrientes (equipos, mobiliario, materiales, maquinarias, terrenos y otros). 
  • Se procederá de la misma manera con los pasivos: pasivos corrientes (obligaciones bancarias, deudas, acreedores, impuestos) y pasivos no corrientes (créditos y préstamos solicitados).
  • El patrimonio también es un dato fundamental. Se calcula a partir del capital invertido y de los beneficios acumulados.
  • La suma del pasivo y el total del patrimonio debe ser igual al total de activos.

Es importante dedicar tiempo y atención a este balance y asegurarse de que se realizó correctamente.

La evaluación a partir del análisis del balance final del año

Una vez que el balance está listo, hay que destinar tiempo a evaluar la situación. Se trata de encontrar explicaciones para lo que ocurrió. ¿Las estrategias y herramientas utilizadas han sido eficientes?, ¿se han aprovechado las fortalezas y los recursos?, ¿la gestión empresarial resultó eficiente?, ¿en qué cosas se actuó correctamente, según los objetivos propuestos, y en qué hay que mejorar?

Estas y otras preguntas encontrarán respuesta en el balance final del año. Esta evaluación es tarea de equipo, por ello lo recomendable es abrirla a la participación de todos. El balance final del año es una herramienta clave para la optimización de procesos y de resultados.

A qué debe estar especialmente atento un emprendedor este trimestre

Septiembre es un mes clave para los emprendedores. La atención debe estar puesta en la planificación y la organización administrativa. La última etapa del 2019 comienza a correr, por lo que es fundamental tener todo en orden para terminar bien el año. En el caso de que estés pensando en iniciar una actividad, también debes evaluar varios factores.

Aspectos básicos para que los emprendedores cierren un año positivo

Calendario de obligaciones fiscales

En octubre comienza el último trimestre y es obligatorio controlar los trámites fiscales de agenda. Son varios los formularios a presentar: 111, 115, 130, 131, 303 y 179. En el caso de las sociedades que necesitan declarar impuestos, es fundamental tener en cuenta el modelo 202.

Por otro lado, desde el 1 de octubre hasta el último día de diciembre, es el período establecido para modificar la base de cotización. Si se ha detectado que se necesitan modificaciones para el próximo año, es el momento indicado para gestionar estos cambios.

Análisis de cuota de IRPF

Los libros contables tienen un protagonismo especial en esta última etapa del año. Tanto el análisis de la diferencia existente entre ingresos y gastos como la amortización de activos, permiten deducir un rango de cuota del Impuesto sobre la Renta. Este dato es importante para tomar nuevas medidas y para saber lo que se abonará en el apartado de Rentas.

Cobro a clientes morosos

Lo ideal para tener un proyecto exitoso es realizar un cierre de año con las cuentas claras. La gestión de cobro a clientes morosos es un factor que los emprendedores deben realizar. Además, si han pasado 6 meses de la facturación y se iniciaron acciones judiciales, es posible solicitar la devolución del IVA. El trámite se realiza en Hacienda como una reclamación de IVA ya pagado.

Deducción de cuotas

Los emprendedores tienen la posibilidad de deducir sus cuotas de seguro social y de autónomos todos los trimestres. Sin embargo, son muchos aquellos que no realizan tales deducciones. Es una gran alternativa que favorece la rentabilidad de la actividad económica en la se han sumergido.

¿Es momento para emprender un nuevo negocio?

Son varios los factores a analizar para conocer el momento idóneo para un nuevo emprendimiento. La estacionalidad, los trámites burocráticos de inscripción, la legislación, los costos fiscales entre otros. Sin embargo, muchos emprendedores coinciden en septiembre como un mes óptimo para lanzar sus proyectos. En especial, en determinados sectores como el equipamiento, artículos para regalos, etc.

En este mes es común que entren en vigor nuevas leyes que regulan muchos aspectos, por lo que ya estarían actualizados quienes comienzan en este mes sus negocios. Además, el período posterior a las vacaciones es propicio para las acciones de marketing y las ventas. Incluso la proximidad con las fiestas navideñas y las posteriores rebajas de enero, también favorece a algunos sectores.

En materia financiera, el último mes del año también tiene sus beneficios; es habitual que se promuevan subvenciones y créditos para emprendedores. Hay que estar alerta a todas las novedades en el sector.

¿Qué puede hacer una consultoría por tu negocio?

Consultoría

La mayoría de las tareas desarrolladas por los seres humanos son susceptibles a mejoras. Los negocios no son la excepción, sin importar cuál sea el campo de acción o el tipo de industria. Siempre hay margen para crecer y optimizar cada uno de los procesos. Esa es precisamente la misión que consigue una consultoría.

¿Qué es una consultoría?

De forma conceptual, una consultoría es un servicio de asesoramiento externo. Las empresas buscan estas ayudas para dar respuestas a sus problemas y necesidades. En ocasiones, los contratantes son incapaces de localizar los fallos; en otros casos, si bien las dificultades están plenamente identificadas, se recurre a profesionales que aporten una perspectiva diferente.

Los consultores, hasta no hace mucho tiempo, abordaban todos los problemas con un método similar. Partían de la idea de que las problemáticas eran siempre iguales. Y el mismo principio se aplicaba a las soluciones que se proponían para corregir los errores.

En los últimos años, aunque siguen vigentes las consultorías con un enfoque “generalista”, cada día tienen más presencia los asesores o las agencias especializadas. Personas y empresas que se dedican al análisis de áreas de negocio perfectamente delimitadas.

 Las tareas de un consultor

Para poder hacer que algo funcione mejor, primero hay que conocerlo a fondo. Por ello, el primer paso en cualquier consultoría es realizar una revisión exhaustiva de todos los procedimientos que la empresa realiza. Ya desde esta etapa, quienes reciben los servicios de un asesor externo empiezan a ganar. El diagnóstico preciso del funcionamiento de un negocio es en sí mismo, una información de mucho valor.

Pero estos servicios alcanzan para mucho más. Los consultores identifican los aspectos que requieren medidas urgentes.  También elaboran listados con los procesos imprescindibles, lo mismo con los que deben ser suprimidos. De igual forma, marcarán pautas para optimizar el uso de todos los recursos (empezando por el dinero). Así como los pasos a seguir para aumentar los niveles de eficiencia y efectividad.

Asesoramiento en finanzas, impuestos, marketing…

Todos los departamentos de una empresa pueden ser revisados por un consultor externo. Desde las finanzas, pasando por la contratación de personal, hasta las estrategias de mercadeo y ventas.

Las consultorías no solo se limitan a observar el panorama en el aspecto interno de un negocio. También sirven para hacer una valoración del comportamiento de los mercados o de los competidores. Razón por la cual resultan vitales para afrontar con éxito los cambios, de acuerdo con las tendencias de cada sector, región, e incluso época.

El hecho de recurrir a una consultoría no implica necesariamente que algo marche mal. También se trata, para empresas en un buen momento y prósperas, de una oportunidad para seguir creciendo y actualizarse. Por otra parte, y cuando las cosas no salen bien, es la ocasión ideal para corregir el rumbo. Pero más importante aún: definir hacia dónde se debe apuntar.

En Resulting ofrecemos el mejor equipo de profesionales, con una experiencia probada y la más alta cualificación, así como los últimos avances tecnológicos. Nuestro objetivo es ofrecer un servicio de calidad a nuestros clientes.